Además, han enmarcado camino para otras mujeres que han hablado por ellas, levantando la voz en escribir canciones que empoderen sus mentes.
Alguna de ellas han dejado una gran historia a través de los años y han sido capaces de demostrar la gran capacidad de romper con el machismo, patriarcado y la discriminación de género.
Lila Downs es un ejemplo de darle forma a un torrente de palabras a través de sus canciones, al defender la lucha por la dignidad de las mujeres indígenas como parte importante dentro de la sociedad.
La más pequeña de la Dinastía Aguilar, siguió con el legado musical de su abuela Flor Silvestre, demostrado ser una mujercita fuerte antes las adversidades que los heaters le han puesto encima. Por ello, defiende a todas las niñas y adolescentes que crezcan trabajando en su «amor propio».
La cantante se posicionó como la más importante dentro de la música ranchera en 1936, como una mujer más guapa, pero más fuerte en ser una de las voces femeninas al luchar por la igualdad de género.
Paquita la del Barrio, tras sus casi 50 años de trayectoria musical dentro del género de rancheras, boleros y música popular mexicana, se ha caracterizado por sus severas letras hacia los hombres, dejando en claro el poder que tiene una mujer ante una infidelidad.
Por último, es importante recodar el éxito que logró la cantante gracias a sus propios méritos, convirtiéndose en un ejemplo para muchas mujeres que empatizan con las vivencias de violencia que sufrió Jenni por muchos años.