Como resultado, hubo una reacción violenta en las redes sociales y críticas de quienes pensaban que el grupo se había alejado de sus raíces.
Yahritza, por su parte, expresó su descontento por el revuelo y ruido de la Ciudad de México, pero fueron sus comentarios sobre la comida mexicana los que despertaron fuerte indignación y generaron críticas como «Son árboles secos y sin raíces».
“La verdad sí, sí me afectó porque miraba yo videos de él y ponían al lado la cara de él y la mía, pero no sabía quién era. Es Pedro Infante, se me hace que sí, expresó el ntegrante de la agrupación.
El debate comenzó cuando Armando el mayor de la agrupación, afirmó en una entrevista que prefería la cocina de Washington.
Sin embargo, este episodio ilustra cómo un comentario puede tener un gran impacto en el mundo conectado de hoy. El cuento de Yahritza y la esencia de ella sirve como un recordatorio oportuno del valor de la autenticidad y el respeto cultural en la era digital.