Cuya obra innovadora se ha convertido en la historia que le cobró vida a Pinocho, basada en el clásico intemporal de Carlo Collodi.
Te mostramos como del director tapatío, dedicó la mitad de su carrera al filme para demostrar que la animación no es cosa de niños, sino “arte”.
La película se realizó en Guadalajara, México.
Del Toro le dedicó la película a su madre, quien falleció a pocos días antes de su estreno en el Festival de Cine de Londres.
El director tardó 15 años en hacer su película de Pinocho.
De acuerdo con Netflix, la película tuvo recursos de 35 millones de dólares. Es decir, 700 millones de pesos.
La obra fue realizada por una técnica llamada «stop motion» para darle vida a las marionetas lo más costoso del filme.
Guillermo del Toro confiesa que lloró cuando escribió Pinocho: «estaba en un baño de lágrimas, esto significo mucho para mí», explicó.
Críticos de «The Wrap» se atreve a calificarlo como una «obra maestra» de la animación.
En cines mexicanos no se pudo ver la película «Pinocho de Guillermo del Toro» por falta de compromiso. Solo se encuentra disponible en salas de cine independientes como la Cineteca Nacional, el Cine Tonalá, Autocinema Coyote y Cines UNAM.
Por último y menos importante, las escenas se crearon en El Taller del Chucho en México, donde colaboró un equipo de más de 40 personas y 28 lámparas.
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