En el año 2014 los principales portales de noticias de este país cubrían una desgarradora historia, la desaparición de una pequeña en un desolado bosque.
Todo ocurrió en la localidad de Kyachchi, en la tundra siberiana, la pequeña había seguido por accidente a su papá al bosque pero ya no encontró el camino de vuelta.
Sin embargo no iba sola ya que en esta infortunada aventura estuvo acompañada de su cachorrita Naida, quien le ayudó a sobrevivir las noches que pasó en el bosque.
De acuerdo a los relatos de la pequeña, ella y su perrito pasaron noches frías juntos abrazados, por lo que casi no pasaron inclemencias por el tiempo del lugar.
De un momento a otro el peludito se alejó del refugio express que habían hecho entre el pasto del lugar y corrió al encuentro de los rescastistas, quienes llevaban dos semanas en su búsqueda.
Quien encontró a la pequeña asegura que no se había dado cuenta de que la pequeña estaba a donde les había guiado el lomito, sino hasta que estiró sus brazos para que la cargara.
Cuando la cargó asegura que se sentía muy ligera, no tenía zapatos y tenía marcas en la piel, al mismo tiempo pidió algo de comer y de beber para después echarse a llorar. El rescatista comenta que tampoco pudo aguantarse las lágrimas.
Cerca del aeropuerto local colocaron una estatua de la pequeña y su lomito, actualmente está estudiando ballet en un internado especial en la ciudad de Yakutsk.