Este fenómeno astronómico fue detectado desde el pasado 16 de agosto, en la escala de medición fue de 1.2 en el nivel B, muy débil a comparación de las eyecciones de clase X detectadas hace 3 años.
A pesar de su relativo bajo impacto, esta onda detectada implica un impacto directo de masa coronal a la Tierra, aunque la explicación de este fenómeno suena fatal, a lo más que podría llegar sería a ocasionar una aurora borealis que podrá ser vista en lugares cercanos al Polo Norte.
Claro, puede ocurrir que la intensidad de las erupciones solares sean mayores y puedan provocar distintos problemas, uno de ellos provoca la expansión de la atmósfera del planeta calentándose en su parte exterior. Este fenómeno provoca que las señales de los satélites tengan más problemas para entrar a la superficie, afectando la comunicación celular, los GPS y la televisión vía satelital.
Los transformadores y centros de energía eléctrica se ven afectadas debido a que esta tormenta solar provoca corrientes en la magnetosfera provocando la acumulación de energía en las líneas eléctricas.