Un estudio confirma que nuestros padres sí tienen un hijo favorito
En las familias con varios hijos, papá y mamá tienen un hijo favorito, aunque ellos digan que aman a sus hijos de la misma manera, esto ha sido comprobado que no es cierto.
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Así es, la mentira se acabó gracias a un estudio realizado en la Universidad de California en Estados Unidos, luego de que se estudiaran varias familias.
Los padres sí tienen un hijo favorito
La encargada de llevar a cabo la investigación fue la socióloga Katherine Conger, quien estudió a más de 380 familias durante un periodo de tres años, por lo que descubrió que el primer hijo sigue siendo el favorito.
Conger publicó una encuesta en el Journal of Family Psychology, en la que se estableció que el hijo mayor sigue teniendo una posición privilegiada dentro de la familia.
Esto sucede porque el primogénito es el primero en recibir toda la atención de los padres, y por esa atención recibida suele ser lo que se espera de él, el más responsable, inteligente y el que suele ser el profesional que sus padres siempre soñaron.
Pero además, el estudio arrojó que el hermano mayor suele actuar de manera correcta porque se siente amenazado por sus hermanos menores y no quiere perder la atención de sus padres, y diferencia de la realidad, piensan que el más pequeño es el favorito.
A pesar de que el primogénito suele ser el preferido, no quiere decir que es el que más cariño recibe, de hecho, los padres suelen ser más exigentes y estrictos con él.
Los padres también prefieren al que más se parece a ellos
Entre otros patrones que se encontraron en la investigación, resultó que algunos padres también prefieren al hijo que se parece más a ellos, no solo en el parecido físico, sino también en el carácter.
Los argumentos dados por las familias fue que, papá y mamá y suelen identificarse más con el hijo con el que comparten la misma personalidad, carácter o gustos artísticos, logrando así una mejor comunicación.
El que exista un hijo favorito no quiere decir que los padres no aman a los demás, incluso, muchos crían a sus hijos sin que ese favoritismo sea perceptible y no cambia nada la llegada de un hijo más pequeño.
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