Seguramente has escuchado de varios lugares que están “embrujados” en la CDMX por toda su historia que guardan y estos son los lugares:
El bosque fuentes brotantes en Tlalpan ha dejado una historia desde exorcismos hasta una piedra encantada que dicen “traga” a las personas, este lugar misterioso y entre sus leyendas también dice que está la llorona.
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Una de las calles en el centro histórico cuanta le leyenda urbana que si te encuentras el fantasma de Don Juan Manuel, lo mejor será correr. Cuentan que el hombre se aparece en la entrada de la que era su casa y pregunta la hora pero si alguien responde “son las 11 de la noche” no vivirá para contarlo.
En este edificio que llegó a funcionar como hotel, el sótano del recinto es lo macabro en sí mismo. Se sabe que en el lugar existía un altar con dulces, juguetes y hasta un vestido de una niña, se dice que desapareció del lugar, pero no hay acceso al público, sólo se conoce su leyenda.
Este hospital tiene la fama de que gracias a una historia de amor: la de la enfermera Eulalia mejor conocida como La Planchada, cuentan que los que han tenido que pasar algunos días internados en este lugar se aparecen enfermos terminales para darles aliento, revisar sus dosis de medicamentos y ver que sigan adelante, todo es perfecto hasta que observan su uniforme que es impecable pero no como el de los demás y no hay registro de ellos en el hospital.
Las celdas que recibieron a intelectuales, a estudiantes del 68 y algunos famosos, guardan muchos secretos. La prisión dejó de operar desde hace muchos años, pero guardias y público en general dicen que se siente una “vibra” cargada en el ambiente, tanto así que suelen escuchar lamentos y ver al Charro negro
Otro recinto donde se supone hay hechos paranormales, se incluyen en el mapa ya que aunque ha cambiado muchas veces de dueño, el lugar no pudo funcionar como centro cultural y terminó cerrado al público que quería ver fantasmas o escuchar el llanto de niño que supuestamente se ahorco en el interior.
Carlos Trejo saltó a la fama en los 90 con su novela al dar los detalles del horror al jugar la Ouija en su casa, Cañitas contaba las aventuras de un grupo de jóvenes acostados por un ente que supuestamente vivió en el monasterio, nunca se comprobó la historia pero la casa sigue ahí.
En Mixcoac existe una calle donde los vecinos aseguran que se aparece el diablo, muchas leyendas han dado fama a la calle, no hay como tal un registro de que haya pasado algo ahí, pero la presencia paranormal en el lugar le ha dado el nombre.
Un ermitaño coleccionó muñecas, según la leyenda era para protegerse de un espíritu que habría muerto en los canales de Xochimilco. Los vecinos y visitantes han asegurado que durante años el lugar está encantado y que las muñecas se mueven, hablan y abren y cierran los los por las noches.
Aunque se volvió un punto de turismo, la leyenda sigue dando escalofríos.
En la esquina de Belisario Domínguez y república de Brasil se encuentra el antiguo recinto de monjas y leyendas, María Gil era una joven que estaba muy enamorada y después de que él la abandono decidió colgarse dentro del convento. Años después personas aseguran haber visto la sombra de la monja penar en los rincones y la sombra de ella colgada en el árbol de durazno.
Uno de los refugios para las leyendas de la Ciudad de México es que cuentan que un militar habitó la calle y asesin0 a un niño y para expiar sus culpas mandó a construir un altar en la esquina de la calle. Con los años los vecinos comenzaron a rumorar de la aparición en el lugar y de una virgen que lloraba en punto de las 12 de la noche.
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