En esta emotiva ceremonia estuvo presente su hijo, José Alfredo Jiménez Gálvez, quien además reveló el origen de este icónico tema.
Muchos de los seguidores de «El Ídolo del Pueblo» han mantenido vivo este tema, el cual a habla de un corcel malherido que corre por la vereda. Pero contrario a lo que muchos creen, esta tonada tiene un significado importante para el desaparecido cantante.
De acuerdo a su hijo, el fue quien le puso al carro de su padre «Caballo Blanco» cuando tenía dos años de edad.
En un tierno gesto le pidió que le escribiera una canción a un «cuaco», refiriéndose a un caballo. Su padre le respondió que «él no tenía cuaco», por lo que inmediatamente señaló el Chrysler New Yorker.
En el año de 1957, José Alfredo tuvo un gira accidentada cuando se trasladó de Guadalajara, Jalisco a Ensenada, Baja California, por lo que contó lo sucedido en esta icónica canción.
La estrofa que dice lo siguiente:
Cuentan que en Los Mochis ya se iba cayendo,
que llevaba todo el hocico sangrando…
Hace referencia a que el automóvil se calentó, provocando que el radiador echara agua a raudales. También uno de los neumáticos se le pinchó, plasmando en la canción que «El Caballo Blanco», Cojeaba de la pata.