Este vestigio cuenta con 425 monedas hechas de oro puro con más de cien mil años de antigüedad.
No, no es poco, el peso de todo esto en conjunto es de 845 gramos con 24 quilates, imagina la cantidad de dinero que esto puede representar.
Este proviene del periodo de Abasí y se piensa que la persona que lo enterró esperaba recuperarlo por la forma en que lo guardó.
Los expertos comentaron que se trata de una cantidad de monedas inusual por el material.
Los dominios de la dinastía en el que fue hallado, se extienden desde Persia al norte de África, y la sede central de su gobierno era en Bagdad.
Este tipo de metal solía ser fundido en repetidas ocasiones e iba pasando de generación en generación.
Encontrar este raro tesoro puede ser una gran contribución a la investigación, ya que los hallazgos de este período en el país son relativamente pobres”.
Con este nuevo hallazgo, los arqueólogos están buscando más sobre la historia de dicho país que aún esconde muchos secretos.