Por mucho tiempo fue considerado que no era la mejor opción para una dieta, por su alto contenido calórico.
Así que si querías bajar de peso, lo último que tendría que pasar por tu mente es comerte un plato de este delicioso manjar, ya que eliminarlo sería difícil.
Pero hoy es diferente, el Instituto Mexicano del Seguro Social se encargó de dar la noticia de que en realidad contiene todos los nutrientes que necesitas.
Así que si la próxima vez te sientes culpable después de comerte uno de estos, piensa que en realidad no te va a afectar como pensabas.
Este platillo típico mexicano, se hace de distintas formas, puedes escoger el color que más te guste y la proteína que prefieras. ¿Ya sabes cuál será el próximo?
Blanco
Este es el más común y el que todos han probado, preparado con maíz seco y carne de puerco o de pollo.
Verde
Este se prepara con epazote, tomate verde y pepita, proveniente de Guerrero.
Rojo
Dicen que viene de Jalisco y la diferencia es que lleva chile ancho y chile guajillo.