No cabe duda que el amor por los peluditos nos puede llevar a hacer maravillas en la vida; aunque puede llegar a otros extremos.
Tal es el caso de las personas que practican el Puppy Play, la cual consiste en personas que se sienten y se comportan como animales. Lo anterior, es el curioso caso de Tom Peters, un hombre que se considera perro y humano desde hace 5 años.
El asegura que este estilo de vida va más allá de un disfraz, también se necesita aceptarse para sentirse cómodos al 100%.
Esta práctica, como en la vida real, requiere que sean cuidados personas «normales» y así cuenta su experiencia.
Entonces tuve este momento de pánico porque un cachorro sin collar es un perro callejero; no tienen a nadie que los cuide. Comencé a chatear con Colin (su dueña) en línea y se ofreció a cuidarme.
Especialistas aseguran que se trata de un desorden emocional, aunque por lo visto, diversas
https://youtu.be/EonM7ynRLsk