En investigaciones que han realizado científicos del Instituto de Ciencias Planetarias en Tucson (Arizona) con ayuda de la NASA, descubrieron que uno de lo satélites de Saturno, de nombre Febe, tiene el agua más extraña que hayan encontrado en el Sistema Solar.
En esta investigación, los científicos se enfocaron a estudiar las relaciones isotópicas del deuterio (D/H) de los anillos de los satélites de Saturno, sin embargo, descubrieron que todos tienen la misma composición del agua de la tierra menos Febe.
«La relación D/H de Febe es el valor máximo medido hasta ahora en el sistema solar, lo que implica que tiene su origen en el sistema solar frío y exterior, más allá de Saturno» explicó Roger N. Clark, autor principal de esta investigación.
Esta investigación también llevó a la hipótesis de que Febe proviene de un lugar mucho más lejano y frío de nuestro sistema sola, ya que la luna de Saturno, Jápeto, resultó tener esta proporción parecida a la terrestre, mientras que Febe la tiene cinco veces mayor.
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