Los miembros de la Policía Penitenciaria de una cárcel de Costa Rica sospecharon del pequeño animal que se paseaba por la cárcel.
Les llamó la atención que deambulaba con una pequeña bolsa atada a su cuello, donde encontraron un teléfono celular con su cargador y audífonos.
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En el primer intento, el gato logró escabullirse por la alcantarilla. Al cabo de dos horas, salió para seguir su cometido pero fue capturado.
Después de su detención y extracción de contrabando, el gato se escapó y dicen seguir viéndolo pasearse por la cárcel.
En el video, se ve que el gato no puso resistencia en su capturación y se pudo quitar con éxito la bolsa de su cuello.
El uso de animales entrenados para cometer actos ilícitos ya se ha escuchado, como el perico que fue detenido por cruzar droga en una frontera con una bolsa atada.
El director de la Policía Penitenciaria comentó lo siguiente:
Nuestra preocupación es lo que implica y significa a nivel de delincuencia el ingreso de celulares, esto permite la continuidad de acciones delictivas desde las cárceles. Las personas que hacen estás cosas no quieren someterse a los procesos de inserción social y aprovechan las vulnerabilidades del mismo sistema para continuar cometiendo delito», expresó el director policial.
Añadieron que creen que existe una banda completa de gatos entrenados que realizar esto, por lo que planean aumentar la seguridad.
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