Según la La Procuraduría Federal del Protección al Ambiente (Profepa) esto se debió a varios factores, ya que se encontraron bacterias de heces fecales, residuos urbanos, por otra parte la sequía y las altas temperaturas de la zona promovieron el crecimiento de las nocivas plantas.
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Sin embargo, se creía que esta tragedia había estado relacionada con Petróleos Mexicanos, como ha estado involucrada con la pérdida de fauna anteriormente, pero de 35 estudios realizados al agua 1 salió positivo, pero fue descartado por no haber sido realizado por un laboratorio autorizado, lo que deslindo en su totalidad a la empresa petrolera.
Para evitar que vuelva a ocurrir este incidente, la Profepa ha establecido un monitoreo continuo de la zona para evitar el crecimiento de la planta tóxica, y así preservar los 500 y mil manatíes que aún residen en esa zona de Tabasco