Decir adiós es una de las etapas más difíciles que puede pasar un ser humano. Un adiós no debe significar el fin, sino el principio de algo nuevo. Aún la nostalgia puede ser una inspiración. Por eso te compartimos algunas señales de que es momento de decir adiós:
Aferrarte a una relación no servirá de nada si es porque te dijeron que hacen buena pareja, por todo lo que te has esforzado o el tiempo que llevas dedicado. Hacer un cambio no quiere decir que no piensas en los demás, simplemente que tú eres quien sabe lo que hay en tu corazón: tus sueños, tus sentimientos, tu sufrimiento.
¿Prefieres ver una película en casa, en soledad, que salir a divertirte? Si estás en un momento en que te pesa más que la alegría que te proporciona es el momento de terminar
Volver a empezar no es malo. Es muy válido darse cuenta que tu camino es para otro lado. Los grandes momentos que viviste siempre estarán.
La desorientación siempre debe hacerte parar y replantearte el camino que debes seguir. Escucha a tu voz interior. Algo fragmentado que no se repara tarde o temprano terminará deshaciéndose y a veces con mucho dolor y estruendo
Haz un análisis de los momentos alegres y los tristes, si lo segundo supera a lo primero, no lo dudes.
Platica, sondea, trata de averiguar si se encuentra en la misma situación. Recuerda que quien quiere estar en tu vida se esforzará porque eso suceda.
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