El estómago y el páncreas se encuentran del lado izquierdo de nuestro organismo, si dormimos de este lado, se favorece la digestión. Así ayudamos a canalizar los jugos gástricos y la secreción de las enzimas. Así ocurre de modo lento y pausado; en cambio si dormimos del lado derecho sucederá rápidamente y no es beneficioso para el organismo.
POR EL BIEN DEL CORAZÓN
Más del 80% de nuestro corazón se encuentra del lado izquierdo. Al dormir del lado izquierdo favorecemos su bienestar porque el sistema linfático puede limpiarlo más fácilmente en esta posición. Además, si nos apoyamos en ese lado, se bombeará e impulsará más fácilmente la sangre a todo el organismo.
FAVORECE EL DRENAJE LINFÁTICO
El lado izquierdo es el lado dominante del sistema linfático, por lo que dormir del lado izquierdo contribuye a favorecer su tarea. Por ahí se drena y se transportan elementos valiosos como proteínas, glucosa o metabolitos. Todos ellos deben ser conducidos hacia el lado izquierdo de nuestro organismo.
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DESCANSAS MÁS
Si haces siesta por cansancio o por quedar llena después de comer, hazlo del lado izquierdo. Así favoreces la digestión y además al despertar estarás más relajada.
POR SALUD DE NUESTRO BAZO
El bazo es un órgano del sistema linfático que sirve para filtrar la sangre y ejecutar una función linfática adecuada. Al dormir del lado izquierdo conseguimos que los fluidos lleguen más pronto al bazo. No hay que olvidar que la mayor parte del sistema linfático está del lado izquierdo.
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