Al salir fuera del coche, siempre cierras las ventanas. Pero incluso si la dejas en una sombra agradable, se puede acumular 400 a 800 mg de benceno.
Si se estaciona el coche en el sol, en una temperatura superior a 16 grados centígrados, el nivel de benceno puede llegar a 2000 a 4000 mg, que es 40 veces más que el nivel permitido.
Al sentarse en un coche que tiene las ventanas cerradas, las personas inhalan el benceno, sin saber que esta toxina afecta a los riñones, el hígado y el tejido óseo.
Además, se necesita una gran cantidad de tiempo y esfuerzo para nuestros organismos para eliminarlo.
Los resultados de la investigación demuestran que antes de que comience a refrescar el aire, el acondicionador de aire expulsa todo el aire caliente hacia fuera, y con ella -el benceno, una toxina que causa cáncer.
Por lo tanto, cuando te sientes en tu coche, incluso si no notas ningún olor de un plástico calentado, abre las ventanas por unos minutos y luego enciende el A / C. Y cuando enciendas el coche deja las ventanas abiertas por unos minutos más.
Protege tu organismo con estas técnicas ya que las consecuencias pueden ser muy trágicas.