Si notas que tu chico o chica atrasa la acción y prefiere quedarse un rato más en el preámbulo, entonces puedes estar seguro que tus besos lo/la vuelven loco/a . Por lo regular, los hombres no dan más de cinco minutos a la «acción», la calentura los lleva a querer empezar con el business.
Si escuchas que gime aunque sea ligeramente cuando están en la esperada sesión de besos, es obvio que le gusta lo que estás haciendo, pero sobre todo cómo lo haces.
Los hombres no son tan vocales con el placer como nosotras y por lo general sólo hacen ruido cuando están cerca del clímax. Por eso, si escuchas ruiditos de placer, le estás dando un mini orgasmo bucal.
Le estás dando unos besos suaves y de la nada sientes que algo en él se endurece, entonces evidentemente tus labios son su afrodisíaco máximo.
Si quiere siempre besarte en pleno acto, es porque de verdad no puede saciarse con un sólo beso. Y si están en una sesión sexual con la postura más complicada y aún así hace el esfuerzo para darte un buen beso, eres toda una maestro en el arte de besar.
Cuando ves que tu galán se vuelve loco y parece que te quiere devorar la cara en vez de atacar otras partes de tu cuerpo, es porque no puede resistir tus besos.
No hay nada como la comunicación directa. ¿Te escribió ese fin de semana que no se vieron para decirte que extraña tus besos? No lo dudes, ¡eres un/una maestro/maestra en el arte del beso!