Ya no sufras. Aquí te damos la solución para que no te suceda esta sorpresita. Sigue estos tips para que tus medias parezcan nuevas por siempre.
Ponlas en el congelador
No es una broma. Antes de estrenarlas, sumérgelas en agua durante unos segundos, escúrrelas bien y mételas en el congelador toda la noche dentro de una bolsa de plástico. Al día siguiente, sácalas y déjalas que se descongelen poco a poco. Póntelas y verás que no se producirán carreras porque has conseguido fortalecer el tejido.
Lávalas a mano o dentro de una bolsa
La atención en el lavado de esta prenda es crucial para que se mantenga perfecta. Si son medias muy finas, te recomendamos que las laves a mano, con jabón neutro y agua fría. Por el contrario, si decides lavarlas en la lavadora, hazte con una bolsa de tela indicada para prendas delicadas y mételas dentro. Así prevendrás a la prenda de posibles manchas y que se maltraten.
No tires de ellas, simplemente mójate un poquito las palmas de las manos y coloca cada una en una pantorilla. Deslízalas hacia las rodillas. Haz el mismo movimiento desde las rodillas hacia la parte superior, y verás cómo poco a poco se colocarán en su sitio.
Ponte las medias correctamente
Te recomendamos que vayas recogiendo la media hasta los tobillos, cojas la media con las manos por ambos lados y metas entonces el pie. Es un proceso más lento pero seguro. Ves subiéndote la media poco a poco, ayudándote del dedo gordo para que queden perfectas.
No dudes en ponerte crema hidratante en las piernas antes de colocarte las medias. Asimismo, guárdalas dentro de un bolsa de plástico porque así evitarás que se enganchen incluso dentro del cajón.
Hombres, antes de casarse tienen que hacer esto