Saltarnos el desayuno puede parecer una buena manera de bajar de peso, sin embargo es un gran error. Cuando no desayunamos en condiciones no sólo no obtenemos la energía necesaria para afrontar un buen día de trabajo, sino que activamos la reserva de energía en nuestro cuerpo, ¿y cómo se almacena la energía? en forma de grasas.
Es fácil además que caigamos en la tentación de picar entre horas, ya que el apetito tarde o temprano acabará apareciendo.
Segundo error: No dedicas el tiempo necesario a tu desayuno
«En la vida ajetreada y estresante que llevamos hoy día es difícil sacar tiempo para algo tan simple como comer» es una frase muy común pero nada acertada. Comer rápido provoca malas digestiones, más estrés y puede afectar a tu humor y rendimiento.
Un estudio llevado a cabo en Israel pudo demostrar que aquellas personas con sobrepeso que consumían más calorías por la mañana que en la cena, quemaban mayor cantidad de grasa abdominal y en consecuencia, perdían más peso que aquellas que se saltaban el desayuno.
Si es necesario, levántate diez minutos antes y disfruta de un buen desayuno. Te dará energía, vitalidad y se verá reflejado en tu salud.
Tercer error: Alimentos light y ricos en hidratos de carbono
Los carbohidratos se asocian con la energía, y es que al ser de digestión lenta, aportan esa energía tan necesaria cuando hacemos deporte. Sin embargo, muchos de los alimentos ricos en carbohidratos lo son también de azúcares.
Los productos light, aunque puedan resultar más saludables a simple vista, pueden no aportarnos la cantidad de azúcar que nuestro cuerpo necesita, por lo que nos pasaremos el día con la necesidad de reponerla con chocolates, bollería industrial y todo tipo de snacks.
Asegúrate de tomar cada mañana la cantidad de azúcar que el cuerpo necesita. La mejor opción es como no, comer fruta. Puedes acompañar tu desayuno con unas tostadas con aceite o queso fresco. Sanas y nutritivas.
Cuarto error: No comes suficiente fruta
Las frutas son fuente de vitaminas, minerales, fibra y azúcares. Saludables, nutritivas y por lo general bajas en calorías (salvo algunas).
Comer al menos 5 piezas de fruta al día nos ayuda a obtener la energía y nutrientes necesarios para el correcto funcionamiento de nuestro organismo, algo que favorece la salud y contribuye a regular nuestro metabolismo y peso.
Hazte un favor y dedica tiempo a tu desayuno. Un pequeño cambio que cambiará tu vida.
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