Los hackers se aprovechan de esa moderna necesidad que tenemos de estar permanentemente conectados y desarrolan estrategias para observar todo lo que hacemos en redes públicas.
Además muchas veces las redes nos vuelven a conectar automáticamente la vez siguiente que pasemos por allí, sin que nos demos cuenta e incluso sin que saquemos el teléfono de nuestro bolsillo.
Mejor esperar a llegar a casa para ingresar datos personales en la red como pagos compras.