El encargado de entregarles su estrella, que los inmortalizará como una agrupación musical con trascendencia fronteriza entre México y Estados Unidos, fue el vicepresidente del Paseo de las Estrellas, Pablo Antonio Castro Zavala, quien les deseó una larga vida musical y sobre todo llena de éxitos.
Agustín Montoya subrayó que los hermanos García, Heraclio, Lupe y Jesús agradecieron a los organizadores del Paseo de las Estrellas por tan grande distinción y prometieron no bajar la guardia para seguir realizando discos con calidad y llenos de ritmo.
“Para ellos es un gran aliciente y un valor extra a su trabajo, que seguramente los obligará a seguir en el gusto de la gente”.