Luego de vender 20 millones de discos, dar presentaciones en los cinco continentes y ganar numerosos premios, la banda sinaloense más conocida internacionalmente fue distinguida por “su legado musical y cultural para los mexicanos de Los Ángeles, donde se haya la población más grande de mexicanos después de la Ciudad de México”, manifestó José Huízar, concejal que representa el distrito 14 de la ciudad.
De manos de Huízar, cada uno de los 18 integrantes de la banda recibió orgulloso un diploma con dicha distinción. “No se había hecho esto antes con un artista mexicano (de este género musical) y esto nos llena de más orgullo y de responsabilidad por seguir haciendo las cosas bien”, expresó Joel Lizárraga, clarinetista del grupo y el menor de los hijos de Cruz Lizárraga, fundador de la banda.
Las tres primeras filas del concilio estaban designadas para los 18 integrantes de la banda, que muy elegantes vestidos de traje negro y corbata llegaron desde muy temprano a la alcaldía de Los Ángeles.
Con gran algarabía, los integrantes del grupo levantaron su reconocimiento mientras el tema “No me sé rajar” se tocaba al fondo, lo que provocó que el concejal del distrito 11, Bill Rosendahl se levantara de su silla para bailar, y que el concejal del distrito 6, Tony Cárdenas, expresara que “mi padre trabajaba aún mas fuerte cuando escuchaba esa música”.
“Gracias a toda la gente que ha apoyado nuestro género (musical). Nos llevamos este reconocimiento para nuestra gente de la República Mexicana”, agradeció emocionado Alfonso Lizárraga, líder de la banda que se fundó en 1938 y que ha lanzado más de 40 álbumes.
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