Ante los gritos ensordecedores apareció Joan Sebastian vestido con sombrero blanco, saco amarillo, camisa blanca, pantalón negro y botas negras, para iniciar la alegre velada con los temas "Sentimental", "Tatuajes" y "Amorcito mío".
Tomó la guitarra acústica y le dijo al público que deseaba que disfrutaran de esta velada tal y como él la estaba gozando, y cantó "Me gustas" y "Estos celos". Enseguida ofreció uno de los éxitos que le compuso a Vicente Fernández: "Quiero decirles que ya estamos trabajando en el siguiente disco", y cantó el tema "La derrota". Recordó que cuando era niño soñaba con que un día sus temas dejaran de ser de él y pasaran a ser las melodías que cantara su pueblo, y esta noche con gusto pudo saborear ese sueño hecho realidad.
Cuando interpretó "Idiota", "Juliantla", "El primero tonto" y "Quien iba a pensar", explotaron las emociones de las jaliscienses: yo sólo compongo las canciones y ustedes deciden qué hacer con ellas.
El momento divertido de la noche fue cuando pidió que subiera al escenario una gordita y le cantó "Así te quiero", con quien bailó alegre y a la mitad de la melodía ingresó al escenario otra tapatía llenita para contonearse al ritmo de la canción.
Joan Sebastian se despidió con "Secreto amor", una de las más ovacionadas de la madrugada, por lo que al término de la misma su público le exigía una más. Después de unos minutos regresó, ahora con un saco rojo, y cantó "Amor limosnero", poco después recibió un pequeño presente realizado por manos de artesanos tonaltecas, lo cual agradeció emocionado.
El cantautor brindó "Me la escondieron sus padres" y agradeció a la gente por los 41 años de cariño que le han brindado a lo largo de su carrera
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