Un adolescente en Nueva Zelanda tenía fotos de su madre desnuda en venta por Internet.
Cuando el sitio TradeMe dio de baja la oferta, el joven volvió a subir un set de fotos pero esta vez ¡con la autorización de la madre! Las fotos fueron retiradas por el sitio nuevamente. Según explicó Jennifer: "Yo quería los cincuenta centavos de la venta pero lo que más extraño son los buenos comentarios".
Las fotos se vieron 11.000 veces antes de que las autoridades de TradeMe las quitaran definitivamente del sitio. Jon MacDonald, vocero de la firma, explicó que "realmente no tenemos interés en transformarnos en el sitio donde uno sube las fotos de su madre en calzones".