Una compañía china exige que los aspirantes a un trabajo muestren sus orejas.
"Tuvimos una charla amena pero al final de la entrevista me pidieron que mostrara mis orejas", explicó Li. Sintiéndose mellada en su dignidad continuó hasta el final debido a que estaba desesperada por conseguir el empleo.
El señor Lin, uno de los entrevistadores, explicó que la expresión y los rasgos faciales juegan un rol muy importante en cómo perciben los clientes a los trabajadores. Y eso incluye las orejas. "Además de sus capacidades y diplomas prestamos especial atención al rostro dado que la cara de un trabajador le puede dejar al cliente una buena impresión sobre la compañía".